Castáñate Las Patas está de vuelta. La prueba de montaña de La Victoria de Acentejo, una de las más especiales y divertidas del Archipiélago, celebrará este domingo su undécima edición con toda su esencia intacta. Sin duda, un acierto más del área de deportes del ayuntamiento victoriano, con su distinguido gusto en la organización de eventos deportivos.
La carrera se compondrá, un año más, de dos distancias. La modalidad larga, de 23 kilómetros, y la corta, de 15 kilómetros. Entre las dos suman 400 inscritos, dato que desvela que se han agotado los dorsales ofertados un año más.
La carrera partirá, en sus dos modalidades, desde el Barrio de Los Arroyos, y finalizará en el emblemático Parque El Pinar. Durante el recorrido los corredores disfrutarán de los mejores senderos naturales de La Victoria de Acentejo y conocerán algunos secretos del municipio. Lugares de paso ya emblemáticos como las escaleras de subida al Bailadero, los tramos de cuerda de la Galería El Nilo, las tuberías o el Sendero de Peregrinación esperan con ansias a los participantes.
Los especiales avituallamientos serán también una pieza importante de la carrera. La distancia de 15 kilómetros contará con 3 zonas para avituallar, mientras que la de 23 kilómetros tendrá 5. Ambas modalidades pasarán por el obligado avituallamiento de Kiko y Margarita, ya un clásico de Castáñate gracias al trabajo altruista de este matrimonio que ofrece sólidos y líquidos a los corredores.
Desde la organización se recuerda a los corredores la importancia de leer detenidamente la guía del corredor, que ya ha sido publicada. En ella aparecen los horarios, los recorridos, y las obligaciones de los participantes.
Con la preocupación por el medio ambiente como una de sus máximas, Castáñate Las Patas lleva a cabo acciones en pro de la naturaleza. Así, se eliminan todos los plásticos de un solo uso, las balizas serán de papel y metálicas, reutilizables, y se eliminan los productos envueltos en avituallamientos.
Como cada edición, las castañas serán un protagonista destacado del evento. Así, a la finalización, la organización llevará a cabo una castañada final en la que repartirá castañas en recipientes individuales acompañadas de vino o refresco.
Castáñate Las Patas se ha convertido en un clásico del calendario de montaña regional. Su espectacular recorrido, que mezcla exigentes ascensos con descenso técnicos en los que, en ocasiones, la ayuda de cuerdas es esencial, hacen de la prueba una de las favoritas de los corredores.
