Carmen Nieves Gaspar Rivero, miembro de la Ejecutiva insular de Nueva Canarias en Tenerife, exige al Cabildo Insular “que haga público cuanto antes el estudio de viabilidad económica para el Tenerife Circuito del Motor”, que se presentó recientemente en el Auditorio. En este sentido, la posición de la organización canarista de progreso se concreta en que esa inversión no se realice con fondos públicos, que deben destinarse a necesidades más acuciantes para el interés general, sino desde el sector privado.

Gaspar Rivero se pregunta “cómo es posible qué nadie conozca aún el estudio de viabilidad económica para un proyecto que cuenta, desde este mismo año, con una inversión plurianual aprobada por el Cabildo de Tenerife de 51 millones de euros”.

Del mismo modo, desde Nueva Canarias en Tenerife “nos cuestionamos cuál será la fórmula de gestión prevista para la explotación de ese trazado. No entendemos tampoco por qué, si esta iniciativa es tan interesante, como nos vende el Cabildo desde el punto de vista de la rentabilidad, tampoco exista ningún interés de la empresa privada para la ejecución y posterior gestión y mantenimiento del circuito”.

También hace constar su sorpresa “por el hecho de que el Cabildo consigne el proyecto del Tenerife Circuito del Motor como la prioridad de una isla que sufre otros problemas en sus puertos, en materia de vivienda, en áreas como el transporte y la movilidad, con los vertidos al mar o en el campo de las infraestructuras sociosanitarias. No compartimos que se priorice con presupuestos públicos un circuito de este tenor, cuyo desarrollo se antoja más que discutible, como una obra clave para el futuro de Tenerife”.

“Por esa razón, lo responsable sería que hubiese absoluta transparencia y se den a conocer los datos del estudio de viabilidad económica, si es que este existe, antes de poner en marcha un proyecto de este calado con dinero público. También puede tratarse de que la única pretensión del actual equipo de Gobierno en el Cabildo sea el de realizar una acción de propaganda política, que costará 605.000 euros por toda una temporada, y con el que tratan de desviar la atención sobre su falta de capacidad a la hora de gestionar los intereses globales de esta isla”, precisó.

A juicio de Gaspar, “la única manera de conseguir los fines perseguidos es haciendo que cualquier proyecto que se ejecute tenga ciertas garantías de éxito. La vía más segura para que eso suceda es estudiando su viabilidad económica dado que, por desgracia, tenemos ejemplos de otros trazados en el territorio que son altamente deficitarios. Hablo de lugares como Motorland Aragón, Los Arcos en Navarra o Valencia, que languidecen año tras año enterrando más de 300 millones de euros de inversión pública desde su creación”.

Llegados a este punto, la dirigente de Nueva Canarias en Tenerife considera que el circuito “no puede ser otra de esas iniciativas a las que estamos tan acostumbrados en esta isla en la que, por desgracia, la falta de capacidad de planificación y gestión de sus responsables políticos termina por convertirlas en sumideros de dinero público, sin repercusión ni beneficio alguno para la sociedad tinerfeña”.

“Sin ir más lejos, ahí están los casos del Puerto de Granadilla o del NAP informático, este último un proyecto de mucho potencial que también acabó olvidado y con parte de los responsables que lo lideraron teniendo que rendir cuentas ante la ciudadanía”, recordó.

Gaspar, por último, subraya que los aficionados al motor “llevan décadas de espera para que este proyecto vea la luz y tampoco saben si cuenta, ahora mismo, con todas las autorizaciones para que colme sus expectativas respecto a la histórica demanda que vienen realizando y que, oportunista y partidistamente, suele atenderse cuando se acercan elecciones para después olvidarse”, concluyó.