Segundo triunfo en el Sweet 16 en el retorno del público al Santiago Martín

El Lenovo Tenerife se impuso este miércoles al VEF Riga (77-64) en el regreso del público al Santiago Martín cinco meses después, en versión reducida y bajo un estricto protocolo anti COVID-19. Pese al aforo limitado, supo a gloria el aplauso y el apoyo de la afición aurinegra, que arropó a los suyos para que sellaran su segundo triunfo en el Sweet 16 de la #BasketballCL, tras tres jornadas disputadas.

El grupo de Txus Vidorreta se empleó con solidez atrás para sacar adelante un partido, que encarriló de entrada, con una gran puesta en escena (23-8); y allanó más tarde, cuando tuvo que sofocar el amago de reacción más consistente de los bálticos al inicio del último cuarto (65-57).

El poder interior de Gio Shermadini, otra vez en modo MVP (31 de valoración); la amenaza desde el perímetro de Sasu Salin (17 puntos con 5/10 en triples) y el criterio de Marcelinho Huertas (ocho asistencias) para liderar al equipo en los arreones determinantes del choque explican en parte la victoria canarista.

Salió con todo el conjunto insular para combinar los balones interiores a Gio con el acierto desde la larga distancia (5/7 en apenas ocho minutos) ante un rival que, pese a los dos triples iniciales de Allman (7-8), sufrió luego para frenar a los aurinegros, cuando Marce impuso el ritmo que más convenía a los suyos (23-8, 26-10).

Solo varias acciones de mérito de Piñeiro mantenían entonces a los visitantes lejos de un descalabro mayor (28-17, min. 10). El caso es que conforme avanzaba el encuentro, el VEF Riga sumaba aciertos para hacer frente a los laguneros. La aparición de Kyser y el buen hacer letón en el rebote dejaban la renta aurinegra en trece arriba al receso (46-33).

Tras la pausa, un nuevo fogonazo canarista amenazó otra vez con la estampida, tras un parcial de 12-0, que amplió la ventaja hasta los 21 puntos (63-42). Sin embargo, el Riga respondió con un 2-14, aprovechando varias acciones espesas de los aurinegros (65-57). No pasó de ahí la irreverencia de los bálticos, que sufrieron luego el poder interior de Gio, bien escoltado esta vez por un activo Emir Sulejmanovic (70-57).

El Canarias, si bien no tuvo la chispa y continuidad adecuada para disparar su ventaja, sí que se mostró muy serio en labores defensivas, lo que le permitió allanar ya del todo su segunda alegría en el Sweet 16. Un pasito más camino de la deseada Final a Ocho, espoleado esta vez por el fiel respaldo de los suyos desde la grada.