El Iberostar Tenerife se mete en el ‘Sweet 16’ por la puerta grande

El Iberostar Tenerife selló este miércoles con nota su billete para el Top 16 de la #BasketballCL. En un nueva exhibición coral (hasta siete jugadores en dobles dígitos de anotación), el grupo de Txus Vidorreta firmó un recital ofensivo para derrotar al Dinamo Sassari (115-85), superar el average con los italianos (traía un -20 de Cerdeña) y asegurar la primera plaza del Grupo A (http://www.championsleague.basketball/20-21/groups), a falta de una jornada para el cierre de la liguilla.

El equipo tinerfeño garantiza así, por quinta temporada consecutiva, su clasificación para el playoff de octavos del máximo certamen de clubes de FIBA Europa, fase que se disputará este año por el sistema de liguilla (https://cbcanarias.net/2020/12/03/la-basketballcl-define-el-nuevo-formato-posterior-a-la-actual-fase-de-gruposs/), con grupos de cuatro equipos cada uno. El sorteo tendrá lugar el próximo día 2 de febrero y los laguneros quedarán encuadrados con otro primer clasificado y con dos segundos de la fase regular.

El de hoy fue un nuevo acto de fortaleza colectiva de los aurinegros. Otro plan de partido meticulosamente preparado y ejecutado permitió a los insulares eclipsar a varios de los pilares del conjunto sardo (Spissu y Bendzius apenas dejaron constancia de su calidad) para, tras una primera parte de intercambio de parciales, sacar a relucir tras la pausa todo su repertorio de argumentos. Hasta 65 puntos en la segunda mitad dispararon a los anfitriones para lograr su mejor registro anotador de siempre en la BCL (115 puntos).

Y eso que el Sassari firmó un 0-7 de inicio. Los de Pozzeco aprovecharon las pérdidas de los locales, pero su buena puesta en escena no pasó de ahí. La mejor versión del hoy titular Fran Guerra cimentó la reacción canarista. El buen trabajo atrás de los aurinegros y el criterio en ataque voltearon el guión con un abrumador parcial de 27-5 que lanzaba a los de Vidorreta en el electrónico (27-12, min. 8). Sin embargo, el conjunto italiano respondió con entereza camino del descanso.

La irrupción de Kruslin y el desacierto local desde la larga distancia se aliaron para meter de nuevo al Sassari en partido, con un parcial de 3-15 de por medio (39-36). El choque cayó entonces en un carrusel eterno de tiros libres, faceta en la que los aurinegros se mostraron intratatables (17/17 al intermedio), lo que les permitió marcharse a vestuarios siete arriba (50-43).

Fue tras el receso, cuando el Canarias puso velocidad de crucero. Los galones de Huertas y Fitipaldo en la dirección; la mejoría del porcentaje desde el 6,75; el martillo pilón de Gio y Fran en la pintura; las acciones de mérito de Sergio Rodríguez o la versatilidad de Tyler Cavanaugh fueron destartalando progresivamente a un rival frustrado, que nada podía hacer mientras los tinerfeños seguían sumando argumentos a la causa.

El Iberostar Tenerife impuso entonces el ritmo que más le convenía y llevó el partido a su terreno para ampliar su renta hasta los 30 puntos finales (115-85) y sellar por la puerta grande su clasificación para el Top 16. Un logro, que repite por quinta campaña consecutiva, y que tiene detrás un importante ejercicio de sacrificio y constancia.