El acceso a la autopista del Norte (TF-5) por la calle San Antonio permanecerá cerrado al tráfico durante este viernes, aproximadamente a partir de las 07:30 horas. Esta interrupción temporal de la circulación tendrá una vigencia de solo un día para que la Concejalía de Obras, Infraestructuras y Accesibilidad del Ayuntamiento de La Laguna pueda ejecutar con total seguridad los trabajos de repavimentación de esta vía. Una vez recuperada la movilidad en este punto a partir del sábado, se pasará a cortar la entrada desde la autopista a la avenida La Candelaria, entre el lunes 12 y el viernes 16, para continuar con la mejora del asfaltado.

El alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, y el edil responsable de área, Josimar Hernández, han visitado este jueves la calle San Antonio para comprobar in situ la evolución de la actuación, que arrancó el pasado lunes y que continúa a buen ritmo, de acuerdo a los plazos de ejecución previstos.

La repavimentación de la calle San Antonio y de la avenida La Candelaria ha sido programada en varias fases y durante el periodo estival, tras la finalización del curso escolar, para evitar las máximas molestias posibles a la ciudadanía. Aunque en un principio se evaluó la posibilidad de realizar la intervención por la noche, el malestar que causarían los trabajos a las vecinas y vecinos que residen en esta zona, afectando a su descanso, ha llevado a la Concejalía a planificarlos en horario diurno. Si bien esta mejora provocará cortes temporales en este núcleo del centro de la ciudad, aunque la previsión es que no se prolonguen más allá de la próxima semana, las otras conexiones de la TF-5 que se encuentran próximas a este punto -a la altura del aeropuerto, por la calle Don Quijote y por la rotonda de Padre Anchieta- siguen funcionando con total normalidad.

Josimar Hernández solicita a la población “la máxima precaución” mientras se mantengan estas modificaciones para el tráfico y pide disculpas por las molestias que pueda provocar la actuación. “Desde el área somos conscientes de que se trata de una intervención compleja porque afecta a una zona muy transitada, pero no podemos aplazar más el reasfaltado debido al deterioro que presenta la calzada. Debemos garantizar la seguridad de conductores y peatones, esa es nuestra prioridad, y confiamos en cumplir con los plazos de ejecución previstos para poder recuperar la normalidad cuanto antes y con todas las garantías”, concluyó.