El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, plantea “declarar la emergencia social en Santa Cruz de Tenerife con la finalidad de agilizar la toma de decisiones y poder disponer de recursos casi de manera inmediata, siempre dentro de la legalidad, para atender de forma urgente las necesidades de la población más vulnerable, así como hacer llegar las ayudas y subvenciones a las entidades y asociaciones del Tercer Sector que colabora en la atención de estas personas”.
“Esta declaración de la emergencia social en el municipio –sostiene Bermúdez- será una instrucción que curse al Instituto Municipal de Atención Social (IMAS), porque no podemos quedarnos con la legislación que tenemos ahora, ya que no nos permite ser todo lo ágiles que necesitamos ser para llegar a las necesidades de nuestros ciudadanos más vulnerables y las asociaciones y entidades que los atienden en nuestro municipio”.
El alcalde aseguró que “es imposible atender o responder a la post pandemia o a la crisis que se genera tras ella con las normas que existen cuando no hay crisis. Es un escenario absolutamente extraordinario que precisa de herramientas extraordinarias, que nos permitan ser rápidos y eficaces, porque en atención social el momento de respuesta lo es todo”.
Acompañado por la concejala de Asuntos Sociales, Rosario González, Bermúdez se reunió hoy con una decena de asociaciones y entidades del Tercer Sector que atienden a personas vulnerables y dependientes en el municipio, así como con otras dedicadas a la formación y el empleo, con quienes compartió el diagnóstico de la “difícil situación que atraviesan muchas familias de Santa Cruz, por lo que la prioridad de este Ayuntamiento se moverá en dos ejes: la atención social y la recuperación de los sectores productivos que permita mantener y aumentar el empleo”.
El alcalde aseguró a las entidades asistentes que “no venimos a destruir, sino a construir, por lo que para nosotros es imprescindible la generación de mecanismos y medidas que permitan el aumento de la actividad de las empresas e incluso la llegada de otras nuevas, algo que todos ustedes notarán porque, al menos, propiciaría que no aumentara de manera tan exponencial el número de usuarios a los que ya atienden de manera tan profesional y solidaria”.
Por parte de las asociaciones y entidades del Tercer Sector presentes en la reunión, continuación de otras mantenidas durante el confinamiento con muchas de ellas, los representantes hicieron hincapié en la necesidad de que se ponga en marcha y se desarrolle la Ley de Servicios Sociales de Canarias, sustentada en el Catálogo de Servicios Sociales y el Mapa de Recursos, cuya puesta en marcha se retrasa tras un año de su aprobación, y que entienden que es absolutamente imprescindible para que las prestaciones a estas personas no dependen de los presupuestos anuales sino establecer una continuidad en la atención a las personas más vulnerables.
Por su parte, la presidenta del Colegio Oficial de Trabajo Social de la provincia, Candelaria Delgado, estableció como líneas prioritarias, además del desarrollo de la Ley, el refuerzo de las plantillas de trabajadores sociales, “ya que aunque se dispongan de medios económicos, si no se tienen los profesionales que los canalicen, no llegarán a tiempo a las necesidades de los usuarios de los Servicios Sociales”.
Las asociaciones y entidades del Tercer Sector, entre las que asistieron Cruz Roja, Provivienda, Cáritas Diocesana, Aspronte, Amate, Mensajeros de la Paz, ONCE, Ataretaco, Fundación Tutelar Sonsoles Soriano y la Asociación Española Contra el Cáncer, coincidieron en la necesidad de disponer de un diálogo fluido y permanente, que coincidió con lo expresado por el alcalde y la concejala, que se mostraron favorables y dispuestos, “tal y como hemos venido haciendo durante este último año y especialmente, a través de medios telemáticos, durante el confinamiento tan duro que hemos sufrido”, apostilló José Manuel Bermúdez.
Es más, el Tercer Sector insistió en la necesidad de que se presione en todos los frentes y sobre la Federación Canaria de Municipios (Fecam), con la intención de que cuanto antes se detalle el Catálogo de Servicios Sociales y el Mapa de Recursos, con la intención de que las subvenciones y ayudas contempladas en la Ley no queden al albur de decisiones temporales y se pueda dotar a los programas de atención social de la necesaria continuidad plurianual.
Para finalizar, el alcalde insistió en que “es imprescindible poner en marcha todas las comisiones del IMAS, con planes de acción rápidos ante hipotéticos casos de emergencia, e identificar y diseñar diferentes planes para diversas situaciones. También deberemos suscribir acuerdos para recursos a medio y largo plazo con administraciones y entidades públicas y privadas que permitan disponer de profesionales, no solo a través de la función pública”.
Bermúdez finalizó añadiendo que “seguirán las reuniones periódicas y se abordará de inmediato la manera de mantener el importe de las subvenciones a las entidades del Tercer Sector, precisamente a través de la declaración de la emergencia social, herramienta, con todas las de la ley, nos permitiría acortar y agilizar plazos”.
En cuanto a los aspectos de entidades dedicadas a la formación y el empleo, el alcalde ofreció las instalaciones del antiguo colegio Tena Artigas, “que están finalizadas desde hace un año y que visitaré en breve para ver cómo están en la actualidad, pero que están a disposición de las entidades para formación para el empleo y para otro tipo formación”.