Este viernes, en Pleno Ordinario del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, se aprobó una declaración institucional consensuada entre todos los partidos con representación en el consistorio municipal que establece seis áreas para hacer frente a la crisis sanitaria provocada por el coronavirus COVID-19 y las medidas para afrontar ‘Una nueva realidad’ en la capital.
El documento refleja su condición de ser “vivo y abierto a posibles aportaciones de cualquier sector del municipio” y busca una reactivación del desarrollo económico de Santa Cruz de Tenerife después del “frenazo en seco de las economías a escala mundial”.
Recuerda el texto, que “el presupuesto municipal, en lo que a ingresos se refiere, se nutre de tres procedencias principales: ingresos propios, ingresos procedentes del Estado; y los ingresos de la Comunidad Autónoma procedentes del Régimen Económico y Fiscal”.
El Ayuntamiento iniciará cambios en sus ordenanzas municipales, dará importancia al nuevo Plan General de Ordenación, modificará los procedimientos administrativos tales como agilizar el pago de las ayudas a las personas más vulnerables y la concesión de licencias de obras y apertura.
Los grupos políticos capitalinos recomiendan “establecer nuevos protocolos de higiene y seguridad en el trabajo y redefinir los espacios físicos laborales apostando por las nuevas tecnologías y el teletrabajo y la comunicación telemática”.
Por tanto, para afrontar esta nueva realidad económica, los representantes municipales consideran que hay seis puntos principales que llevar a cabo:
1.- Realizar una modificación presupuestaria, atendiendo a la nueva realidad de los ingresos y, a las diferentes políticas a implementar para paliar las consecuencias de la crisis de la COVID-19.
2.- Contener el gasto corriente.
3.- Reorientar los gastos hacia tejer una red de seguridad que proteja a los ciudadanos, con especial atención a los más vulnerables. Preservar la actividad económica y el empleo en el municipio. Adaptar las estructuras internas del Ayuntamiento a la nueva realidad económica. Construir la nueva realidad física los espacios públicos.
4.- Analizar la posibilidad de aumentar el endeudamiento para poder garantizar las ratios de inversión en el municipio.
5.- Garantizar el pago a proveedores en tiempo y forma, haciendo un esfuerzo de puesta al día con el retraso que existía en el pago de proveedores en este momento.
6.- Un paquete de medidas fiscales que pasan por nuevos calendarios de recaudación para el segundo semestre de 2020, recuperar el IBI social y la exención del cobro de tasas por ocupación en terrazas en vía pública en el presente año y el próximo.
