Agentes de la Policía Local de Santa Cruz intervinieron en auxilio de dos menores de edad que, al parecer, habían sido abandonados temporalmente por su progenitora en un solar ubicado en El Sobradillo. Los policías acudieron tras un requerimiento que alertaba de esta situación sobre las 18:00 horas del lunes. Al llegar al lugar de los hechos, una vecina estaba proporcionándole agua a los niños debido a su situación y las altas temperaturas registradas. Los policías comprobaron que en dicho descampado no había una zona de sombra, ni tampoco fue posible localizar a la madre de los menores.

Ante la presencia policial varios vecinos se acercaron para explicar que esta situación ya había ocurrido anteriormente, corroborando que la progenitora suele dejarlos solos en esa zona con algo de alimento y permanecen allí solos durante varias horas. Aunque los menores estaban en un estado de mucho nerviosismo se comprobó su especial vulnerabilidad y la gravedad de estos hechos, por lo que se activó a los integrantes de la Unidad Adscrita a la Fiscalía del Menor para aplicar el procedimiento adecuado en estos casos.

En todo momento, y con los datos recabados, se trató de localizar a la madre de los menores, aunque con resultado infructuoso, tanto es así que incluso la autoridad judicial ordenó su ingreso en un centro de acogida. El testimonio de los vecinos apuntaba que este comportamiento es habitual por parte de la madre. Valorando el estado físico de los menores, en especial del niño de dos años, se determinó su traslado para ser valorados en el centro de salud de Tíncer.

Mientras tanto se iniciaron las gestiones para practicar las diligencias por la gravedad del riesgo al que eran sometidos los menores y la posible comisión de un delito por parte de la progenitora. Posteriormente, en la Sala de Comunicaciones de la Policía Local se recibió una llamada derivada del Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES) 1-1-2 del Gobierno de Canarias, tratándose de la madre de los pequeños que mostraba su preocupación por no encontrarlos en el solar en el que los había dejado.

La mujer, de 45 años de edad, fue atendida por un mando de la Policía Local santacrucera que le pidió que se personara en las dependencias policiales, donde finalmente los menores fueron entregados a su madre. De cualquier manera, se le informó de todas las actuaciones realizadas y del traslado de los informes oportunos y las diligencias a las autoridades pertinentes, desde la Fiscalía del Menor, al departamento municipal de Atención Social y la Dirección General de Protección de la Infancia y Familia del Gobierno canario.