La Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información publica en el Observatorio Canario de Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información el Perfil Internauta en Canarias 2021, cuyos datos se obtienen de la encuesta sobre equipamiento y uso de TIC en los hogares, que realiza anualmente el Instituto Nacional de Estadística.

En el documento se destaca como respecto al año anterior, se detecta una subida importante en el uso habitual de internet por las personas menos formadas (7 puntos porcentuales de los analfabetos y 11 de las personas con educación primaria). También hay que destacar el incremento, por segundo año, en el uso de internet por personas con más de 55 años (11 puntos porcentuales en el tramo 55-64 y 6 en el tramo 65-74). También se aprecian subidas también significativas en el uso habitual de internet en los hogares con menos ingresos (7 p.p.) y en las poblaciones de menos de 10.000 habitantes (7 p.p.).

El perfil demográfico y socioeconómico de personas internauta en Canarias analiza el nivel de uso habitual de internet en función de parámetros como la edad, el sexo, los estudios finalizados, la situación laboral, los ingresos del hogar y el tamaño de la población de residencia.

El perfil general internauta en Canarias es el de una persona menor de cincuenta y cinco años, con estudios de segunda etapa de secundaria o superiores, y con ingresos medios o altos.

Entre los factores analizados, la educación continúa siendo el más determinante: el uso de internet varía entre el 38% de la población analfabeta (sin ningún tipo de estudios) y el 100% de las personas con estudios de FP.

La edad, segundo factor en importancia, registra una variación entre un 59% de internautas entre las personas de más de 65 años y el 100% de las personas menores de 35 años.

La variable ingresos presenta una diferencia de doce puntos porcentuales en población internauta entre los hogares con mayor y menor renta, mientras que entre ocupados y parados la diferencia es mínima.

En cuanto al tamaño de la población de residencia, en las de menos de 50.000 habitantes hay una ratio de internautas menor, aunque en las de menos de 10.000 habitantes es superior.

Por último, en 2021 el registro de mujeres que hacen uso habitual de internet se mantiene cerca de un punto porcentual por encima del de los hombres.

Por tanto, la educación, la edad y la disponibilidad de ingresos constituyen factores a tener en cuenta para atacar la llamada brecha digital.

Respecto al año anterior, hay que destacar la reducción de las diferencias en poder adquisitivo, categoría en la que se ha producido un incremento de once puntos porcentuales del nivel de uso habitual de internet en el tramo <900 euros; y en educación, con un aumento de 22 p.p. del nivel de uso de las personas sin estudio.

Por tanto, la educación, la edad, y la disponibilidad de ingresos se presentan como factores para tener en cuenta para atacar la llamada brecha digital.

Perfil del internauta comprador

El perfil demográfico y socioeconómico del internauta canario comprador habitual (aquella persona que ha realizado una compra por internet en los últimos tres meses) es una persona menor de 45 años, con estudios de FP o universitarios, con ingresos medio-altos o altos y residente en una población de entre 10.000 y 20.000 habitantes o de más de 100.000 habitantes.

En el caso de las compras por internet el factor educación registra también las mayores diferencias, que varían entre el 12% de compradores habituales entre la población con estudios de primaria y el 62% de las personas con una licenciatura universitaria.

La capacidad económica es, evidentemente, otro factor destacado, variando la compra habitual por internet entre el 57% de los hogares con ingresos mensuales entre 1.600 y 2.500 euros y el 15% de los que tienen menos ingresos.

En lo que respecta a la edad, este factor muestra una tasa de utilización decreciente con los años, con la excepción del tramo más joven (entre 16 y 24 años). Se aprecia una diferencia considerable entre los menores de 45 años y la población mayor.

En cuanto al tamaño de la población de residencia, se aprecia una tasa de uso creciente con el tamaño de la población, con la excepción de las poblaciones de entre 10.000 y 20.000 habitantes, donde se supera la media.

Por último, se registra un porcentaje similar de compradores habituales entre las mujeres y los hombres.