El viceconsejero de la Presidencia del Gobierno de Canarias Antonio Olivera detalló, tras el Consejo de Gobierno de este jueves en la sede de Presidencia de Las Palmas de Gran Canaria, que no se ha tomado aún ninguna decisión sobre el COVID y los actos de Navidad.
Olivera ha querido desmentir algunas informaciones sobre supuestas prohibiciones de actos relacionados con la Navidad y el Carnaval y dejar claro que son “rotundamente falsas”. El viceconsejero asegura que la comisión de trabajo formada por representantes de Salud Pública y de las corporaciones locales de Santa Cruz de Tenerife y de Las Palmas de Gran Canaria no ha tomado ninguna decisión sobre dichos actos. Aunque el objetivo claro siempre ha sido garantizar la máxima seguridad para evitar la trasmisión del virus, el viceconsejero recalca que en la reunión del pasado martes (2 de noviembre) no decidió prohibir ningún evento.
Según aclaró, en esa cita se planteó que, debido a la actual mejoría en las cifras de incidencia, a que todas las islas siguen en fase 1 y a las coberturas vacunales alcanzadas, puedan mantenerse, como mínimo, las actividades que se celebraron el pasado año en esas mismas festividades con el añadido de la flexibilización de las medidas en cada nivel de alerta que ya recoge el Decreto de 2 de septiembre de 2021, así como las posteriores modificaciones realizadas o potenciales.
Olivera recordó que en esa reunión se acordó que los dos ayuntamientos enviarán una relación de actividades y planes de contingencia para ser analizados con el fin de flexibilizar las restricciones, siempre que el nivel de riesgo así lo permita. Además, subrayó que se sigue a la espera de las recomendaciones de la Comisión de Salud Pública y del Consejo Interterritorial de Sanidad, que aún no se han pronunciado sobre esta cuestión.
Sobre la celebración de cabalgatas de Reyes y la comparación del recibimiento a sus Majestades con la celebración de competiciones deportivas en estadios, indicó que estos eventos deportivos se rigen por un acuerdo nacional y que los espectadores de esas competiciones son, en su inmensa mayoría, adultos y están debidamente vacunados mayoritariamente, mientras que en ese acto tan central de la Navidad los asistentes mayoritarios son menores no vacunados y sin obligación de llevar mascarilla en los que tienen menos de 6 años.
Olivera recuerda que seguimos en situación de pandemia y que, aunque la evolución es positiva, aún no se han alcanzado los indicadores epidemiológicos fijados para pasar a la denominada “nueva normalidad”.
