Sanidad establece un circuito único para luchar contra el coronavirus en Canarias

La Consejería de Sanidad establece un circuito único para luchar contra el coronavirus en Canarias. El decreto de estado de alarma aprobado el pasado sábado por el Consejo de Ministros pone “todos los medios sanitarios civiles y militares, públicos y privados” a disposición del Ministerio de Sanidad. En este sentido, la Consejería de Sanidad se ha encontrado una total predisposición de los hospitales y centros privados del Archipiélago para colaborar en la gestión de esta crisis sanitaria global.

La consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Teresa Cruz Oval, aseguró  que “en este momento de alarma no existe una sanidad privada y una sanidad pública: existe una única Sanidad”. “Tenemos que ponernos en el peor escenario posible y para eso estamos trabajando de forma conjunta y coordinada, siempre colaborando”, concretó la consejera.

Tras mantener diferentes reuniones de coordinación, en las que ha participado tanto Teresa Cruz como los directores de área de  Gran Canaria y Tenerife, se ha fijado que los hospitales de referencia para el tratamiento del COVID-19 sean los centros de tercer nivel del Archipiélago: Hospital Universitario de Canarias y Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, en Tenerife; y el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín y el Complejo Hospitalario Universitario Insular – Materno Infantil de Canarias, en Gran Canaria.

De la misma forma, las clínicas privadas han puesto a disposición del Servicio Canario de la Salud tanto sus instalaciones como todo su personal. Con el trabajo conjunto de ambas, y teniendo en cuenta las necesidades de los centros de referencia, existirá una colaboración estrecha en todo el proceso asistencial: derivación de procesos quirúrgicos, descongestión de los hospitales…

Se prevé crear un listado de médicos intensivistas único para toda la isla, de manera que se organicen de forma conjunta para atender a los pacientes. Además, ya se está formando de manera activa a los profesionales para que, cuando sea necesario, puedan atender a los pacientes de forma automática.