El Iberostar Tenerife cayó derrotado este domingo sobre la bocina ante un combativo Acunsa Gipúzkoa Basket (89-87), en un partido irregular de los aurinegros, que no rindieron al nivel de jornadas anteriores y se complicaron la vida, especialmente en el último cuarto.
No jugó nunca del todo cómodo el conjunto canarista, que amagó varias veces con la ruptura (15-28, 49-62), pero no tuvo esta vez la consistencia y la continuidad necesaria para llevar el encuentro a su terreno e imponer sus señas de identidad.
Un día malo en el triple (7/23) y la falta de solidez defensiva fueron en contra de los intereses insulares ante un rival, el donostiarra, que ofreció su mejor versión y dio un paso al frente para agarrarse con mucha fe al encuentro y llevarse de manera justa el triunfo, tras un epílogo a cara o cruz, no exento de emoción.
Arrancó más acertado el Acunsa, que aprovechó los primeros ataques fallidos de los tinerfeños para poner un 4-0 de inicio. No se hizo de esperar la reacción insular. El Canarias enhebró entonces varias buenas defensas y comenzó a correr tras robo para coger las riendas del electrónico; al tiempo que Gio Shermadini comenzaban a marcar territorio en la pintura (8-16).
Un triple de Sergio Rodríguez ponía a los laguneros en franquicia al inicio del segundo cuarto (15-28), pero el Gipúzkoa se metió en partido con argumentos.
Con Jhonny Dee muy inspirado (diez puntos casi consecutivos) el grupo hoy dirigido por Iñaki Martín firmó un parcial de 9-0 (24-28) y siguió haciendo méritos ante un Iberostar, que amagaba pero no terminaba de abrir una brecha importante (39-45, min. 20). Okouo anotó con cierta fluidez y el Acunsa no tiró nunca la toalla.
Tras la pausa, el guión se repetía por momentos. El Canarias insinuaba con imponer su juego (49-62, tras triple de Fitipaldo), pero el conjunto vasco no se rendía nunca. Un parcial de 8-0, en la transición del tercer al último cuarto, con dos triples de por medio de Carlson y Pere Tomás, devolvía la emoción al encuentro (62-66) y daba alas a un Acunsa que creía cada vez más en sus posibilidades.
El partido creció entonces más igualado. El Canarias no tenía la fluidez deseada en ataque y su tono defensivo no era el de otros días. Los balones interiores a Gio y las acciones de Cavanaugh compensaban la falta de acierto del perímetro, pero el choque se ponía cada vez más cuesta arriba: 68-70, tras dos triples seguidos de Pere Tomás y Span.
El duelo volvió al alambre en los minutos finales y fue ahí donde el Acunsa se mostró más acertado. De hecho, los de San Sebastián llegaron a ponerse seis arriba y con posesión con dos minutos para el cierre (86-80). Lo intentó el grupo de Txus Vidorreta que forzó un desenlace a cara o cruz, pero ahí la moneda sonrió a los anfitriones, que habían opositado con merecimientos a la victoria.
Oroz falló dos libres con 86-84 en el marcador; Fitipaldo anotó luego uno para el 86-85 y Gio puso el 86-87, con un mate, tras saque de fondo de Huertas. Sin embargo, en la acción final, con solo 1,5 segundos para el final, Carlson redondeó el partido de los locales sobre la bocina para dejar la victoria en Donosti.
Triunfo justo de los vascos, que no debe empañar la histórica primera vuelta de los tinerfeños (14/4). Toca corregir errores, levantarse y volver al redil de las victorias.