Las fiestas en honor al Santísimo Cristo de La Laguna regresarán este año a su plaza con más de una decena de actos populares para celebrar las solemnidades de esta edición. La música, el humor, la tradición y el color volverán a llenar este espacio bajo un estricto protocolo de seguridad, en cumplimiento con las normas y recomendaciones de las autoridades sanitarias frente a la crisis sanitaria, después de que la pandemia obligara en 2020 a llevar la programación a otros escenarios.
El centro histórico de la ciudad ya está engalanado para iniciar la festividad más emblemática del municipio y la amazona Sara Expósito, subida a caballo, se encargó el pasado viernes de anunciar el comienzo de los festejos, un singular pregón que llevaba 37 años sin llevarse a cabo.
Con la esperanza puesta en la mejora de la situación epidemiológica que sufre la Isla y, por tanto, La Laguna, el alcalde accidental, Rubens Ascanio, y el concejal de Fiestas, Badel Albelo, han dado a conocer este lunes el programa preparado para este año. Ambos estuvieron acompañados por el presidente de la Esclavitud del Santísimo Cristo de La Laguna, Francisco Doblas; el responsable de la Orquesta Sinfónica de Las Palmas, Rubén Sánchez; y el autor del cartel de esta edición, Juan Cairós.
La programación, si bien podría sufrir cambios en función de la evolución de la crisis sanitaria, está formada por 39 actos que se concentrarán, sobre todo, en la plaza, el Teatro Leal, el exconvento de Santo Domingo y el Real Santuario.
Para Rubens Ascanio, “septiembre es uno de los meses más laguneros que hay gracias a una tradición centenaria, que se ha convertido en una seña de identidad y en un momento entrañable y especial. Hablar del Cristo de La Laguna es hablar de patrimonio, fiesta, cultura y arte”, resaltó el alcalde accidental, para posteriormente agradecer a la Concejalía de Fiestas y al resto de áreas implicadas el esfuerzo realizado para que, a pesar de la pandemia, se pueda disfrutar de esta cita “de una forma segura, con la esperanza de que en 2022 pueda celebrarse tal y como las conocemos”.
Por su parte, Badel Albelo se encargó de dar los detalles del programa, que estará disponible en la web del Ayuntamiento. Aunque este año “vuelve a estar marcado por la crisis sanitaria”, indicó que los actos regresan a la plaza con un estricto protocolo que implicará diversas medidas de prevención. Entre ellas, destaca un aforo máximo en el espacio de 650 personas. Para controlar la asistencia a cualquiera de los 14 actos que tendrán lugar “en este espacio acotado y seguro”, se deberá contar con ticket de acceso, disponible en www.mueveticket.com y en el punto de venta que se habilitará en ese espacio, junto al Santuario.
La tradicional exhibición pirotécnica también se recupera en esta edición, después de que en 2020 tuvieran que suspenderse, con una importante novedad: “Con unos fuegos que reducirán considerablemente la contaminación acústica”. En esta línea de trabajo por conseguir una celebración más respetuosa y que pueda ser disfrutada por todas y todos, el concejal afirmó que también se tomarán una seria de medidas para que esta festividad “pase a ser la más inclusiva de la historia”.
El edil agradeció a todas las personas implicadas el esfuerzo realizado, “especialmente al alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, que, aunque no ha podido estar presente, lleva seis meses trabajando en la organización”. De igual forma, mencionó “al personal del área; a todos los agentes que hacen posible la programación (artistas, técnicos, productoras…); a Julio Torres, por su colaboración en la elaboración del programa; a Israel Espino, director del grupo de Los Sabandeños; y al equipo organizador del Festival Juvenil”.
Gracias a esa implicación, las fiestas podrán desarrollarse pese a las limitaciones actuales, continuando con una tradición “de más de 400 años de historia y parte fundamental de nuestro patrimonio inmaterial y material”, sino también por la dinamización económica que implicará “en la cultura, un sector que se ha visto muy afectado por la crisis sanitaria, y en la creación de puestos de trabajo”.
De forma paralela, agregó que se podrá usar el espacio militar, anexo a la plaza, para colocar en ese lugar una feria de atracciones, en caso de que la situación epidemiológica lo permita, “para apoyar esta actividad, que también se ha visto muy perjudicada por la pandemia”.
Durante la presentación, el autor del cartel, Juan Cairós, señaló que “para cualquier artista, crear el cartel de la fiesta grande de La Laguna no solo supone un gran orgullo sino un gran reto personal, donde cuida celosamente cada detalle, participando del binomio de lo sacro y lo festivo”.
Programación
Las fiestas arrancarán oficialmente este miércoles, a las 20:30 horas, con el pregón en el Teatro Leal -a cargo de José Gómez Soliño, exrector de la Universidad de La Laguna, catedrático en Filosofía Inglesa y presidente de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife- y se prolongarán hasta el 29 de octubre, el último día para disfrutar de la exposición Galarza:el arte de hacer arte.
Entre las citas previstas, se encuentra el concierto México Sinfónico, que ofrecerá la Orquesta Sinfónica de Las Palmas este viernes, a las 21:30 horas, en la plaza del Cristo. Su presidente, Rubén Sánchez, subrayó “el placer enorme de estar en unas fiestas que trascienden más allá del municipio y por su tradición y alcance llegan a toda Canarias”. La formación interpretará grandes temas del folclore mejicano adaptados a la plantilla orquestal, acompañada por instrumentos típicos del país y “con cuatro voces muy versadas en este género” como Fabiola Trujillo, Mara Pérez Manuel Estupiñán y José Santana.
Respecto a los actos religiosos, Francisco Doblas se mostró cauto sobre los detalles, ya que los horarios y espacios podrían cambiar en función de la evolución de los datos de la pandemia. Por lo pronto, señaló que se están trabajando en tres escenarios ante el “gran anhelo” existente por ver al Santísimo Cristo en la calle, después de que el pasado año no pudiera salir debido a las restricciones derivadas de la crisis sanitaria. Por un lado, no se ha perdido la esperanza en poder trasladar el Santísimo Cristo a la Catedral, aunque “parece casi imposible”. Por otro, se estudia la posibilidad de sacarla a la plaza o, como tercera opción, dejarla en el interior del Santuario, como ya ocurrió en 2020.
De acuerdo a la programación prevista, el obispo de la Diócesis Nivariense, Bernardo Álvarez, presidirá la eucaristía del jueves 9 y el Solemne Quinario, desde ese día hasta el lunes 13. El martes 14, tendrán lugar las celebraciones eucarísticas en honor al Cristo y el teniente general Carlos Palacios Zaforteza, jefe del Mando de Canarias, recibirá el bastón de la Esclavitud del Cristo, en representación oficial del Rey.