El Cabildo de Lanzarote, a través del Área de Obras Públicas, continúa ejecutando su Plan de instalación de barreras de protección para motoristas en la red de carreteras insulares. De este modo, tal y como avanza el consejero Jacobo Medina, “ya se ha ejecutado casi el 80% de este plan, instalando más de 4.000 metros lineales de estas barreras con el objetivo de mejorar la seguridad vial y reducir al máximo la siniestralidad en las vías insulares, especialmente entre los motociclistas”.
Precisamente, el Cabildo acaba de redactar un nuevo proyecto para dotar de barreras de seguridad la carretera LZ-2 que conecta Arrecife con la localidad de Playa Blanca, concretamente en el tramo que une los puntos kilométricos 0+600 y 10+100. Con una inversión que supera los 9.000 euros se tiene previsto instalar 476 metros lineales de barreras.
Estas nuevas actuaciones se suman a las ya realizadas en las carreteras LZ-201, concretamente en el tramo comprendido entre las localidades norteñas de Ye y Arrieta; en el enlace de las carreteras LZ-2 (Arrecife-Playa Blanca) y LZ-3 (Circunvalación de Arrecife); LZ-10 (Tahiche – Haría), en la LZ-703 (Las Breñas – El Golfo) y en la LZ-704 (Yaiza – El Golfo), las cuales ya disponen de este sistema de protección, siguiendo las recomendaciones de la Dirección General de Carreteras para reducir los accidentes entre los conductores de motocicletas, uno de los colectivos más vulnerables.
El consejero de Obras Públicas, Jacobo Medina subraya que “el Cabildo ha realizado una inversión de más de 350.000 euros en este plan para dotar de mayor seguridad a las carreteras de la isla”. Con respecto a la elección de los tramos en los que se ha actuado o se actuará próximamente, cabe señalar que “los técnicos han priorizado aquellos puntos más peligrosos, como las curvas que existen en la LZ-10, entre Teguise y la localidad de Los Valles, o bien donde se hayan registrado un mayor número de accidentes en los últimos años”.
Junto a la instalación de estos nuevos sistemas de protección, el Cabildo también está ejecutando mejoras en el asfalto y la señalización, tanto vertical como horizontal, de las carreteras de titularidad insular para apostar por una circulación mucho más cómoda, segura y eficaz.