El área de Desarrollo Rural del Ayuntamiento de La Laguna ha retomado los talleres de agricultura urbana después de meses de parón debido a la actual crisis sanitaria. Las actividades, que tienen como finalidad potenciar el autoconsumo y la producción local, se llevan a cabo en la Casa del Ganadero de forma presencial, respetando todas las medidas de seguridad frente al COVID-19.
La Huerta Urbana en Envases, el nombre que recibe este proyecto, parte de la propuesta de la Asociación Cultural Agrarte para divulgar y desarrollar la agricultura urbana, una forma alternativa de cultivo y distribución de alimentos que aprovecha los recursos locales disponibles y fomenta el autoconsumo. Para ello, se recurre al huerto urbano, familiar o cooperativo habilitado en espacios adaptados para la producción, como terrazas, balcones y maceteros.
En una primera etapa, antes de las restricciones derivadas de la pandemia, estos talleres se desarrollaron en diferentes centros ciudadanos del municipio, en colaboración con la Concejalía de Participación Ciudadana, cubriendo la totalidad de las plazas disponibles. Sin embargo, el responsable de Desarrollo Rural, Aitor López, explica que las acciones tuvieron que ser suspendidas tras la declaración del estado de alarma de marzo.
Durante este tiempo, “se han estudiado distintas fórmulas para poder retomar las actividades, determinándose que la Casa del Ganadero, dependiente del Cabildo de Tenerife y ubicada en el camino San Diego, cumple con todos los requisitos necesarios para recuperar la iniciativa, al ofrecer las condiciones adecuadas para su impartición y permitir aplicar todas las normas y recomendaciones sanitarias”, apunta.
Con este proyecto, se han desarrollado experiencias de agricultura ecológica, “favoreciendo la adquisición de conocimientos, valores y técnicas para la autoproducción y contribuyendo a la seguridad y soberanía alimentaria de la población. Además, dado el carácter terapéutico del huerto, se mejora la salud de las personas en todas sus vertientes, incluyendo la física y emocional”, agrega Aitor López.