El Ayuntamiento de Santa Cruz, a través del área de Infraestructuras y Obras que dirige Dámaso Arteaga, inicia desde el próximo lunes, día 20, los trabajos previos de vallado de la actuación que tendrá lugar en la zona conocida como Arcos de la Noria consistentes en la demolición del quiosco y la recuperación del espacio en los bajos del puente Serrador, una obra que el alcalde, José Manuel Bermúdez, entiende que “devolverá este espacio para uso y disfrute de la ciudadanía, ya que se convertirá en una zona peatonal y de descanso en el centro de la ciudad y en esta emblemática calle”.
Arteaga, por su parte, informa de que “la demolición es la primera fase para la restitución del espacio urbano perdido, por lo que se realizará demoliciones controladas de la totalidad de los pavimentos, soleras, rellenos, cerramientos, acabados, etcétera”, eso sí, abunda el concejal, “respetando y protegiendo las especies vegetales del entorno inmediato para evitar los golpes por las máquinas empleadas en la demolición”.
En esta fase inicial de los trabajos, y de manera general, se procederá a la colocación de las protecciones de seguridad y apeos necesarios, para garantizar la estabilidad de los elementos a demoler y adelanta Dámaso Arteaga que “previo a la demolición de cualquier elemento, se procederá a cortar los posibles suministros de energía de la calle, evitando actuar sobre canalizaciones enterradas, efectuando regados con frecuencia con la finalidad de evitar la formación de polvo, y si fuera necesario, se desinfectará evitando contagios”.
En el apartado de las condiciones que imperarán en la citada actuación, se procederá con medios mecánicos a la retirada y limpieza de la superficie resultante, teniendo especial cuidado con las labores que se realicen próximas a las edificaciones colindantes y zonas de pasos de peatones, etcétera.
En la fase de acabados que se le darán a los arcos consistirá en un enfoscado de cemento y arena, una capa de enlucido de cal para protegerse de la humedad y la capa final de pintura así como se procederá a la reparación de la piedra basáltica de las zonas bajas en contacto con lo demolido, por lo que se ha incorporado a la nueva zona urbana recuperada dos zonas estanciales bajo los árboles existentes buscando el descanso y las vistas del entorno y el puente.