El Área de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha abonado este viernes un total de 135.000 euros a 226 taxistas del municipio. Se trata del primer pago de la subvención a las personas titulares de una licencia de autotaxi vigente y en activo para paliar la caída en la facturación provocada por la COVID-19 que fue anunciada por la alcaldesa, Patricia Hernández.
El segundo teniente de alcaldesa y concejal de Servicios Públicos, José Ángel Martín, explica que “con este primer pago cumplimos con el compromiso adquirido con las asociaciones de taxistas para apoyar a un sector que ha seguido trabajando, cumpliendo su deber, pese a las dificultades impuestas por el estado de alarma”. “Las subvenciones tienen cada una un montante de 600 euros y son compatibles con las convocadas por otras administraciones”, recuerda el edil.
El montante total que tiene previsto el consistorio es de un millón de euros en dos tandas de ayudas a este medio de transporte público. Los únicos requisitos exigidos en la convocatoria son ser titular de la licencia en activo del taxi y acreditar la caída de la facturación en un 75%. Con esta subvención se intentan cubrir “los costes fijos del taxi que circula por Santa Cruz y que en estos tres meses, por el impacto del estado de alama, han visto como se reducía su actividad”.
Además de las abonadas este viernes, queda pendiente un segundo grupo, así como aquellas solicitudes pendientes de subsanar defectos, cuyo plazo también acaba ahora. Las ayudas han sido acordadas con las asociaciones del sector presentes en la Mesa del Taxi, con las que el grupo de gobierno ha trabajado desde el comienzo del mandato para mejorar sus condiciones. Así, se logró implantar la tarifa única para prácticamente la totalidad del municipio, una demanda histórica.
José Ángel Martín resalta “la voluntad del Ayuntamiento de consensuar este tipo de medidas, contando con el sector a la hora de implantar cualquier medida”. “Se han realizado consultas sobre el número de licencias en calle, establecido ahora en un 50%, que aunque sean informales es una buena manera de contar con lo que piensan profesionales y titulares de licencias”, añade Martín.
El edil resalta el “clima de entendimiento y la voluntad de acuerdo que siempre hemos encontrado en la representación del sector”. Por ese motivo, “no queremos dejar de contar con quienes están en la calle prestando este servicio, sino tomar la mejor medida que contribuya a cumplir tanto con la necesidad de transporte público con los requerimientos de la actual situación sanitaria”. El concejal destaca que este servicio público es esencial en la movilidad de la ciudadanía y que “los taxistas han sido conscientes de que tenían que aguantar los costes y mantenerse en la calle, pero ello no les puede suponer una carga insoportable que les obligue a cesar en su actividad”.