El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, acompañado por la concejala de Acción Social, Rosario González, además de técnicos del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS), visitaron ayer el dispositivo provisional nocturno instalado en el Pancho Camurria para 35 personas sin hogar “que en estos momentos están expuestas a una serie de circunstancias que dificultan los procesos de inclusión social y su protección frente a la pandemia”, aclaró el alcalde.
Bermúdez aprovechó la ocasión para “reclamar al resto de los municipios un paso al frente en la atención a las personas sin hogar, con la finalidad de que dispongan en sus localidades de recursos provisionales de este tipo para las personas sin hogar”, y añadió que “realizo esta petición con los datos de que la gran mayoría de las personas que utilizan este servicio provienen de otras localidades de la Isla, e incluso de otras Islas y de la Península, ya que Santa Cruz es el único municipio que dispone de un Centro Municipal de Acogida (CMA), con lo que se produce un efecto llamada”.
En este sentido, el alcalde recordó “las soluciones para las personas que se encuentran en las calles tienen que darlas los profesionales, ya que quienes llegan a esta situación, habitualmente vienen con una mochila de problemas de todo tipo, y no siempre las circunstancias acompañan ni se dejan ayudar, y en muchas ocasiones presentan otras circunstancias que deben ser tratadas por profesionales, tanto de la medicina como del trabajo social” y remarcó que “disponemos de dos unidades móviles para atenderlos allá donde estén y, si fuera necesario, trasladarlos a centros sanitarios o al propio CMA”.
Por su parte, la concejala de Acción Social recordó que “se trata de un recurso de emergencia por la situación de la COVID. En este sentido, hoy mismo nos hemos visto en la obligación de habilitar un recurso, ya que empezamos un toque de queda a las 22:00 horas”, y añadió que, “al mismo tiempo que se facilita este recurso provisional, desde el CMA se hace un estudio histórico donde se comprueba que en la época de invierno es cuando más se demanda este servicio, caso en el que ahora mismo nos encontramos, en el que unas 15 o 20 personas se quedaban sin la posibilidad de pernoctar en el Centro Municipal de Acogida”.
Para finalizar, Rosario González asegura que en esta instalación provisional “se tienen en cuenta, como no podía ser de otra manera, todas las medidas COVID en este recurso de emergencia por las circunstancias que vivimos, y se cumplen todas, teniendo un control de las personas que acuden, a las que se les facilitará una mascarilla nueva cada día y demás medidas de hiegiene y aseo personal”.
El nuevo espacio alojativo provisional permitirá que todas las personas vulnerables que han sido derivadas a través del Centro Municipal de Acogida (CMA) puedan permanecer en un entorno con menor riesgo de contagio, menor exposición al frío y llevando una vida digna en el interior del recinto.