El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife anuncia que este miércoles darán comienzo las obras del proyecto para dar continuidad peatonal a las Ramblas de Santa Cruz.

Se realizarán unas actuaciones de mejora de la continuidad peatonal en la Rambla de Santa Cruz, precisamente en los cruces de la misma con las calles San Isidro, calles Arquitectos Saavedra y Díaz-Llanos y calle San Martín, una actuación que propiciará la mejora de las tres intersecciones, permitiendo la accesibilidad y los diferentes cruces, que se adecuarán a personas con movilidad reducida, y cuya inversión lleva un coste aproximado de 100.000 euros y con una duración de prevista de cuatro semanas.

Dicha propuesta quedará terminada con los asfaltados previstos de las mismas en la obra de Rehabilitación de Firmes de varias Calles de Santa Cruz (Lote 2) que se ejecutará próximamente y que tiene previsto reasfaltar tanto el viario como los peatonales de dichas Ramblas.

Por su parte, desde el área de Movilidad y Accesibilidad Universal se anuncia que estas obras supondrán que mañana habrá importantes cambios de tráfico en la confluencia de esta vía con la calle San Isidro. Tras los oportunos informes técnicos del servicio y la coordinación de los trabajos con la empresa de conservación de las vías públicas municipales, se prevén diversas intervenciones en las dos cabeceras de la zona peatonal de Ramblas a ese punto del viario. Esta actuación se ha decidido que sea ejecutada en el periodo estival para aminorar las afectaciones al tráfico de la ciudad por ese lugar.

Concretamente, para la ampliación del itinerario de peatones se cerrará ese tramo central de la Rambla; también será necesario suprimir el cambio de sentido y giro a la izquierda para los vehículos que desciendan por la citada vía. Además, se prevé eliminar el acceso a la Rambla, sentido ascendente, y la entrada a la calle Pedro Pérez Díaz desde Méndez Núñez.

Otra de las decisiones planteadas será impedir acceder a Ramblas de Santa Cruz, sentido ascendente y hacia la calle Pedro Pérez Díaz desde la calle San Isidro. Por último, no será posible realizar el cambio de sentido y acceso a la calle San Isidro, giro a la derecha, desde la propia Rambla en dirección hacia el centro de la ciudad.   

Lógicamente, por motivos de seguridad vial se procederá a instalar un vallado perimetral del área en el que se va a actuar; se adoptarán todas las medidas preventivas y de señalización de las diversas prohibiciones; también se establecerá un itinerario alternativo para canalizar a los peatones que transiten por esa zona. La previsión de duración de estos trabajos será de un mes. La Policía Local colaborará para facilitar la adaptación a estos cambios de los conductores y peatones.