Los ayuntamientos del sur de Tenerife, junto con el sector del taxi de la comarca, hacen frente común para combatir la problemática que está generando la implantación del servicio de Uber en esta parte de la Isla. El encuentro, que ha tenido lugar este lunes en el San Isidro Espacio Cívico (SIEC), ha sido convocada por el Consistorio granadillero ante la preocupación del sector y las discrepancias que se están generando a nivel local.
En la reunión se ha contado con la presencia de las alcaldesas de Granadilla de Abona, Jennifer Miranda; de Arona, Fatima Lemes, y de Guía de Isora, Ana Dorta, y de los alcaldes de San Miguel de Abona, Arturo González, y de Santiago del Teide, Emilio Navarro, aparte de los concejales de Transportes y los representantes de las asociaciones del taxi del sur, entre otros.
Entre las conclusiones de este foro sobre las VTC, se acordó proponer al Gobierno de Canarias que efectúe, a la mayor celeridad, las modificaciones legislativas pertinentes para introducir factores de sostenibilidad y de congestión del tráfico en la regulación relativa a posibles nuevas solicitudes de VTC en Canarias, que vayan más allá de criterios de estricta libre competencia y de las particularidades de la ultraperificidad de las islas Canarias. Del acuerdo se dará traslado posteriormente al Cabildo de Tenerife y el Gobierno de Canarias, con vocación de mantener reunión conjunta entre todas las administraciones.
Jennifer Miranda argumentó que se trata de aunar esfuerzos para abordar una situación que afecta a toda la comarca y a un sector del que viven directa e indirectamente miles de familias, y que en estos momentos se encuentran en una situación “delicada” y de “incertidumbre”. En este sentido, hizo hincapié en que “es necesario la unión para actuar con urgencia y lo antes posible para que se puedan realizar este año las modificaciones oportunas de la normativa que regula al sector y poder dar garantías y seguridad al secto del taxi”.
Por su parte, Fátima Lemes, manifestó que “se trata de hacer un frente común de la comarca para defender y luchar por el sector ante cualquier eventualidad, ya que se trata de un sector vital para Arona y la Isla, todo en el marco de la presentación de las reivindicaciones y necesidades ante la incursión de los VTC. Es esencial la buena sintonía entre todos y actuar con rapidez para el buen funcionamiento del colectivo y buscar los mecanismos legales en todos los ámbitos para crear un bloque común en defensa del sector”.
Ana Dorta resaltó la relevancia de la unidad entre las instituciones y el sector, para abordar con unanimidad esta situación y conseguir las mejoras necesarias en la movilidad y en pro del taxi y de un asunto que nos afecta a todos.
Arturo González insistió en que hay que actuar con celeridad para que la problemática que sufren tantas familias con motivo de la implantación del UBER no vaya a más y, por lo menos, minimizar las consecuencias, además de mostrar su apoyo firme con el sector.
Emilio Navarro recalcó que se trata de “una tema preocupante” en el que todos debemos posicionarnos firmemente en defensa de este sector y hacer fuerza para regularizar y minimizar la presencia de este nuevo servicio de transporte.
En cuanto al sector, los representantes de las asociaciones del taxi agradecieron la celebración de este encuentro para tratar la implantación del UBER en esta parte de la isla, y reconocieron que la situación es de “incertidumbre” y “muy delicada”, por lo que pidieron una regulación y una modificación legislativa para hacer frente a la espada de Damocles de las licencias de Uber, además de la colaboración de las policías locales, y también que se dé traslado del acuerdo a Cabildo y Gobierno de Canarias.