El Iberostar Tenerife no pudo recuperar el título de la FIBA Basketball Champions League al caer este domingo en la final del torneo, disputada en Amberes, ante la Virtus de Bolonia, por 73-61. El mal inicio de partido, con 20-8 de parcial en los diez primeros minutos, veinte pérdidas de balón y la continuada falta de acierto desde el tiro de tres, con sólo cinco triples convertidos de treinta y siete lanzamientos, fueron una losa muy grande para unos aurinegros que intentaron dar la vuelta a la situación, ya que llegaron a ir perdiendo de hasta dieciocho puntos de diferencia en varios momentos y recortaron la distancia a seis puntos, pero la reacción se quedó en un espejismo y el título voló a Italia.
Tal y como sucediese en la semifinal ante el Brose Bamberg alemán, Kevin Punter volvió a tirar del carro del conjunto transalpino y con 26 puntos, con cinco de cinco desde el triple, además de siete rebotes, fue el factor decisivo del encuentro. Además, estuvo bien secundado por M’Baye, con 16 puntos; y Mario Chalmers (campeón de la NBA 2013) con 8 puntos en los momentos claves del choque.
Por el lado aurinegro, Coltón Iverson anotó 11 puntos y capturó 9 rebotes; y Tim Abromaitis encestó 18 puntos, con 9/9 desde el tiro libre, y atrapó 8 rechaces. Llama la atención que Nico Richotti pasó de ser titular en la semifinal a no jugar ni un segundo en la final.
En lo que al encuentro se refiere, la Virtus de Bolonia lo controló de principio a fin y fue siempre por delante en el marcador, con un parcial de 7-0 de salida que ya marcó cómo quería que fuese al partido, con un ritmo muy alto tanto en ataque como en defensa, donde fue muy agresivo y físico, asfixiando al jugador del Iberostar Tenerife que tuviese el balón y metiendo muchas manos y con una zona de línea muy adelantaba que obligaba a tirar desde muy lejos y no permitía la circulación del esférico ni el juego interior. Así, los entrenados por Txus Vidorreta sufrieron un parcial de 20-8 en el que perdieron nueve balones, no anotaron en los ocho tiros exteriores que realizaron y sufrieron el buen hacer ofensivo de Punter y M’Baye para los de Djorjevic, con nueve puntos cada uno.
En el segundo cuarto la reacción fue tímida por parte del Iberostar Tenerife, no suficiente para inquietar a los bianconeros. Subieron un poco más el nivel defensivo, lo que les permitió empezar a tener opciones en el rebote bajo ambos aros y además en ataque empezó a aparecer Colton Iverson, que se convirtió en la principal referencia anotadora. Por fuera, los errores se seguían acumulando desde el triple, llegando el primer acierto con una conversión de Pierre-Antonie Gillet a falta de un minuto para el descanso, al que se llegó con 1/16 desde el perímetro y 38-24 en el marcador.
Tras el descanso, el panorama no cambió. El Iberostar Tenerife no sabía cómo contrarrestar el ataque italiano e intentó ponerse a su nivel físico y fue castigado en demasía por parte de la trío arbitral, llegando a ponerse en bonus en los tres primeros minutos del cuarto y con Brussino viendo su cuarta falta personal, lo que lastró su participación. La diferencia era clara, Punter seguía haciendo daño desde fuera y el cuadro lagunero se automutilaba no anotando, llegando al cuarto decisivo con 3/24 desde fuera y 58-44 en un electrónico que durante este cuarto llegó a marcar dieciocho puntos arriba para Bolonia: 42-24.
En el periodo decisivo fue cuando el Iberostar Tenerife echó el resto e intentó reaccionar. El acierto desde el triple seguía sin llegar, pero la circulación de balón por fin empezó a parecerse a la habitual del equipo de Vidorreta. Así, llegaron opciones de tiros a media distancia y balones al poste bajo para canastas posteriores; al igual que opciones de acudir a la línea del tiro libre, al empezar a acumularse las faltas personales en el casillero ajeno. Bolonia llegó a estar dos minutos y medio sin anotar en este cuarto y en el conjunto aurinegro emergió la figura de Tim Abromaitis para poner a los suyos a seis puntos de distancia, 65-59, faltando 1:37 para el final, pero ahí una más que discutible falta señalada a Rodrigo San Miguel, con técnica posterior por las protestas del jugador, terminaron de decantar la balanza para el, a la postre, campeón del torneo, que aprovechó la coyuntura para volver a poner tierra de por medio y alejarse definitivamente hasta el 73-61 final.
El Antwerp, tercer clasificado
El Telenet Giants Antwerp luchó por conquistar la tercera posición de la ‘Final Four’ de la que ha sido anfitrión y lo consiguió derrotando este domingo al Brose Bamberg de Alemania. Jae’Sean Tate, con 16 puntos y 7 rebotes; y Tyler Kalinoski, con 10 puntos, incluyendo dos triples, guiaron al cuadro belga al triunfo.