El Ayuntamiento de La Laguna, a través de la concejalía de Obras e Infraestructuras que dirige Andrés Raya, ha iniciado la reparación de las losetas de piedra de las calles peatonales del casco histórico. Los trabajos, que comenzaron este lunes y se prolongarán durante dos semanas, han sido adjudicados a una empresa especializada por 39.415 euros.
Andrés Raya explica que “las labores consisten en la sustitución de numerosas baldosas que se encuentran deterioradas para mejorar la accesibilidad y el tránsito de las personas, haciéndolo más cómodo y disminuyendo de forma considerable el riesgo de sufrir algún accidente por parte de los viandantes. Con esta reparación, que se lleva a cabo cada año, se consigue en resumidas cuentas garantizar la seguridad de los transeúntes al ofrecer unas condiciones óptimas para el disfrute a pie del conjunto histórico”, agrega el edil.
Estas obras de conservación se desarrollan en función de la urgencia que presente el pavimento, priorizándose la actuación en aquellos lugares con mayores desperfectos, e implican la demolición de las losetas y adoquines en mal estado, la instalación de nuevas piedras ignimbritas y basálticas y la recolocación de aquellas que todavía puedan ser aprovechadas. La realización de estos trabajos, no obstante, permiten el normal funcionamiento de estos espacios públicos al no implicar acciones de gran calado.
“Las baldosas de piedra son una de las características principales de las calles peatonales de La Laguna, siendo una de las señas de identidad del casco histórico por el que pasean centenares de personas cada día. Mantenerlas en buenas condiciones es una prioridad para el Ayuntamiento, ya que no solo es primordial para facilitar el tránsito a pie y fomentar la movilidad sostenible de una manera cómoda y segura, sino porque también impacta en la imagen de la ciudad Patrimonio de la Humanidad”, resalta Andrés Raya.
Según especifica el concejal de Obras e Infraestructuras, “estas actuaciones se desarrollan de manera periódica para asegurar una conservación adecuada, lo que conlleva además un menor impacto económico al limitarse cada año a trabajos de mantenimiento”.