Esta semana han terminado los trabajos de instalación de las placas de energía solar fotovoltaica para autoconsumo colectivo en el Centro de Educación Infantil y Primaria de Punta Brava. La instalación proveerá de energía al propio colegio y a la estación de bombeo de aguas residuales de Bencomo, ubicada en el barrio de Punta Brava.
La planta fotovoltaica, instalada aprovechando el máximo espacio de la cubierta del CEIP, generará un ahorro energético y económico público del 58%, lo que se traduce en más de 5000 euros al año de ahorro para las arcas municipales. Se espera que el próximo mes la planta sea capaz de cubrir el 100% de la energía que consume el propio centro, con lo que pasará a ser un «ECOcentro de enseñanza». Además, esta instalación se ha desarrollado teniendo siempre como primer objetivo causar el menor impacto visual y la menor interferencia posible con la actividad educativa normal del colegio.
“Hay que destacar”, comenta el concejal de Ciudad Sostenible David Hernández, “el efecto de concienciación climática que supondrá esta instalación para el municipio y especialmente para el alumnado, ya que el centro contará con una con una pantalla que permite el visionado instantáneo de la energía solar o verde que produce en cada instante así como y la emisión de kg de CO2 que se evita verter a la atmósfera gracias a ella.”
Estas actuaciones, junto con la instalación en el Polideportivo Santaella, se suman a nuevos proyectos de plantas fotovoltaicas para edificios públicos que ya están tramitándose desde el área de Ciudad Sostenible para acercarnos a una actividad pública cada vez más responsable y solidaria con el medio ambiente.
